top of page

...Y Paula Rego re-creó a la Mujer

  • Foto del escritor: Liceo Magazine
    Liceo Magazine
  • 5 ago 2017
  • 3 Min. de lectura

Actualizado: 9 jun 2022

Estos días (hasta el 8 de Octubre de 2017), La Virreina, el Centro de la Imagen de Barcelona, exhibe una gran retrospectiva de la obra de la pintora portuguesa Paula Rego: "Léxico Familiar", una oportunidad única para revisar personalmente (¡y gratis!) la obra de ésta excepcional artista.

La mujer protagonista de la obra de Paula Rego se aleja de todas las concepciones del imaginario creado para ella por el heteropatriarcado: dócil, sumisa, hermosa, delicada, bondadosa, protectora. La mujer de Rego aborrece todos estos estándares; es, por el contrario, bárbara, despreocupada, borracha, viciosa, sexualmente activa, escandalosa, vengativa, asesina, grotesca, muy grotesca.

Cada cuadro (o serie) es una bofetada o mejor aún, un escupitajo en los ojos del espectador. Es difícil no cerrarlos a la primera mirada, para luego abrirlos, curiosos y adentrarnos en ella hasta revolver toda la escena y hacernos partícipes de la misma.

"No conozco la inocencia; los cuentos de hadas no son inocentes, son crueles; una de mis imágenes favoritas es de Max Ernst de la Virgen pegando al niño Jesús. Decía a El País en 2014. Yo pinto las cosas tal como las siento o siento que podrían ser. Las sensaciones incomodas pueden ser útiles. Puedes utilizar los celos para vengarte de alguien porque los sentimientos fuertes hacen arte fuerte si lo haces bien, y todavía mejor si se convierte en una rabieta", explica la artista. Y sigue: "En mis obras castigo a doña Violeta, una maestra que tuve en la escuela a la que odiaba, y la castigo adrede".

Hay una necesidad de venganza latente en la obra de Paula Rego: venganza hacia su educación infantil, eclesiástica, cultural... como si vengándose a sí misma vengara a todas las mujeres.

Justamente, son las heroínas de los cuentos de hadas que leía de niña, algunos de sus personajes fetiches. Rego destroza la inocencia de las mismas como una niña grande, maltratada, puede cortarle la cabeza a sus muñecas.. La Blancanieves es brutalmente masculina, desproporcionada de cualquier rasgo de belleza. Caperucita Roja termina convirtiéndose en toda una metáfora del abuso sexual, con un lobo/padrastro que la seduce a espaldas de la abuela y una madre, que el cuento relegó pero que aquí aparece para matar al lobo/marido y arrancarle la piel..

La literatura, clásica o eclesiástica, la historia o el teatro son su fuente de inspiración. Su pintura no recibe una inspiración abstracta ni es producto de sueños o inspiración divina, claramente es su respuesta directa ante lo que ve, lee y escucha. "Creo en la Virgen María, pero no tengo nada que ver con los curas; mi padre era muy anticlerical y consciente de la hipocresía de la Iglesia; él era justo y generoso y vio a la iglesia apoyando el fascismo en Portugal". Esa imagen de la Virgen y el niño podría ser fácilmente resignificada en Chica con Feto, una de sus obras más aclamadas y polémicas, por posicionarse a favor del aborto en un país tan católico como Portugal.

Evidenciando una solidaridad incondicional con quienes sufren opresiones no deseadas, los personajes de Rego son, al mismo tiempo, amos y esclavos, practican el sadismo y lo padecen. Sin embargo, antes que una postura nihilista, esta crueldad de ida y vuelta señala cierto cortocircuito respecto a las asignaciones de conducta vinculadas con el género y con la extracción económica y social. La impronta de la educación católica en países como Portugal o España y en generaciones como las de la artista, el peso de la fatalidad entendida como paradigma inalterable, el honor y el sacrificio como valores clausurados sobre sí mismos, no como construcciones públicas, hallan en la obra de Paula Rego una reescritura de orden ideológico, son vehículos que exorcizan la memoria personal y colectiva.

 
 
 

Comentários


* Los datos personales que proporciones al suscribirte, serán tratados conforme la normativa vigente de Protección de Datos (LOPD y RGPD) y gestionados en un fichero privado por Andreina Agusti Silva, responsable de Liceo Magazine. La finalidad de la recogida y tratamiento de los datos, es para enviarte mis publicaciones, promociones y contenidos exclusivos para suscriptores. La legitimación se realiza a través de tu consentimiento expreso. No introducir tus datos, tendrá como consecuencia el no poder atender tu solicitud. En ningún caso tus datos serán cedidos a terceras personas. Puedes ejercer tus derechos de rectificación, oposición y/o eliminación de tus datos, enviando un email a liceomagazine@gmail.com

bottom of page