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  • Foto del escritorLiceo Magazine

"Les Marocains", de Leila Alaoui, a punto de despedirse del YSL.


La exposición temporal "Les Marocains", de Leila Alaoui, en el Museo YVES SAINT LAURENT de Marrakech, cerrará el 5 de febrero, tras su exitosa muestra que arrancó el pasado otoño y que sirvió como reencuentro y homenaje a la obra de esta consagrada fotógrafa y videógrafa marroquí que perdió su vida en 2016 en Ouagadougou, Burkina Faso, durante un ataque mientras realizaba un informe para Amnistía Internacional.

La exposición en el YSL es uno de los tantos homenajes que la artista ha recibido en Marrakech, ciudad donde creció (En el Instituto Francés, por ejemplo, una sala de cine ahora lleva su nombre.)

'Les Marocains', una serie de fotos "marroquíes", inspirado en "The Americans" de Robert Frank y "In the American West" de Richard Avedon, incluye retratos "tomados de la vida, despojado de todo artificio, para mostrar la verdadera cara de Marruecos". El Museo YSL, logró montar la exposición en colaboración con la Fundación Leila Alaoui, siendo éste uno de sus últimos proyectos, en el que trabajó entre 2010 y 2014, años en los que se desplazó a través de Marruecos con su estudio fotográfico móvil.

"Aprovechando mi propia herencia, he vivido en varias comunidades y he usado el filtro de mi posición nativa marroquí para revelar, en estos retratos, la subjetividad de las personas que fotografié", explicó la artista en el texto de presentación de su proyecto, que Debutó en 2015.

Nacida en París en 1982, Alaoui estudió fotografía en la Universidad de Nueva York. Su trabajo exploró la construcción de identidad, la diversidad cultural y la migración en el Mediterráneo. Alaoui utilizó la fotografía y el videoarte para expresar realidades sociales a través de un lenguaje visual que todas las personas entienden. Su trabajo se ha exhibido a nivel nacional e internacional desde 2009 y sus fotografías se han publicado en numerosos periódicos y revistas.

Pierre Bergé dijo de ella: "Leila Alaoui fue una de esas personas comprometidas que no dudaron en viajar por el mundo para ayudar a los demás, a testificar, y esto es lo que hizo su obra más bella. Sus convicciones eran profundas. La forma en que ha desaparecido justifica la lucha que he llevado toda su vida por la tolerancia. "Cuando deje de indignarme, habré comenzado mi vejez": pienso en André Gide cuando recuerdo a Leila Alaoui. " Una exposición que parece estar tocando el alma de los marroquíes.

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